top of page

¡Hola!

SOY ANDREÍNA MELANIE

venezolana, comunicadora de profesión y asesora de imagen graduada en el Instituto Europeo Di Design

en Madrid.

He trabajado con marcas como Louis Vuitton, CH Carolina Herrera, Elie Saab, Purificación García y Rapsodia, entre otras. Manejé sus relaciones públicas de la mano de una señora que prácticamente es la institución y referente de la moda en Venezuela, mi querida Blue.

Blue.png
Aruba Fashion Week Marker.png
CH Carolina Herrera.png

Desde que tengo recuerdos siempre me ha fascinado la ropa.

 

De pequeña era rellenita y sentía que no todo me quedaba bien. La mayoría de las veces me daba un poco de vergüenza ponerme cosas que mostraran esos kilitos de más.

 

Para ese momento, compartía habitación con mi hermana mayor. Admiraba su manera de ser, segura, radiante. Federica se desenvolvía con confianza. ¡Siempre se veía bien!

 

Yo quería sentirme así.

 

Mi hermana era delgada y eso me llevó a creer por muchos años que ser delgada era un requisito para tener confianza y seguridad en mí misma, pero como vas a leer más adelante, descubrí que no tenía nada que ver con eso.

 

Recuerdo un día en que mi hermana no estaba en la casa, y empeñada en tomar esa confianza prestada, fui a su clóset y me probé una camisa blanca manga larga. De repente, frente al espejo, empecé a comportarme un poquito distinto y a sentirme mejor con mi cuerpo. Esto me llamó tanto la atención que, en la próxima invitación que tuve a una fiesta, me llevé escondida esa camisa blanca.

Y EMPECÉ A NOTAR

ALGO...

En la fiesta me sentía más bonita, más cool, más a gusto conmigo. Esa noche desaparecieron muchas dudas de mí misma y la desconfianza por ser rellenita. El alivio era notorio, al menos para mí.

 

Pasaron los años y lo seguí haciendo cada vez que tenía la oportunidad. Me metía en su clóset, escogía la ropa, la metía rápido en la cartera y salía corriendo de la casa. Nunca perdía el chance de experimentar estos superpoderes que la ropa podía darme.

 

A mi hermana no le gustaba prestármela porque, aunque no me guste admitirlo, yo no era muy cuidadosa con la ropa (ahora la entiendo mucho más). Pero con mi creatividad —y el resto de mi familia como cómplice—, lograba las más divertidas hazañas. Así fui poniendo más atención en cómo me sentía con cierto tipo de prendas...

Poco a poco fui confirmando que la elección de ropa iba más allá de la ropa, afectaba mis emociones y mi estado de ánimo. Pasaba a tener más o menos seguridad en mi día a día y vi que eso también afectaba mi confianza para lograr mis metas.

​

Sumado a esto, con el pasar de los años, otras personas también empezaron a pedirme consejos de qué les quedaba mejor. Más amigas comenzaron a mandarme fotos de opciones de ropa, desde su clóset o desde las tiendas, y yo feliz de ayudarlas porque empecé a notar la confianza que les daba.

 

Así que me decidí a profundizar en este “superpoder” de la ropa. Si me escribían tanto, alguna habilidad natural (que no estaba viendo) tenía que tener, además que me gustaba muchísimo hacerlo.

 

Investigué y encontré una carrera que se llamaba Asesoría de Imagen. —WHAT? ¿De verdad esto existe como profesión? ¡Me anoto ya! — Pensé apenas lo vi.

Nuestra Ropa Tiene un Impacto Mayor al que Creemos

Saliendo de la Zona de Comfort

En este máster aprendí cosas maravillosas, entre ellas los tipos de cuerpo, cómo lograr la armonía en cada uno de ellos y cómo usar la ropa en servicio del cuerpo que tenemos.

 

Formalizando mis estudios como asesora de imagen fue que por fin entendí que la base para tener confianza en uno mismo no tiene tanto que ver con nuestro cuerpo, sino qué tanto lo aceptamos y lo vestimos acorde.

 

¡Si hubiese podido decirle esto a mi yo de 10 años! Me hubiese evitado muchos sufrimientos, pero lo bueno es que ahora puedo compartir estos aprendizajes con otras personas.

 

En Madrid también tuve la suerte de trabajar con la talentosísima diseñadora venezolana Patricia Padrón, que construyó su marca de lujo y quien me enseñó de cortes, de telas y de todo lo que lleva la producción de una pieza, entre otras cosas.

IED.jpg
PP.jpg

Con estas experiencias y muchas otras, así como con herramientas que he ido descubriendo en mi camino, ahora abro las puertas al público a mis servicios como asesora de imagen personal.

 

Para el momento de escribir esto, vivo en Ciudad de México y también trabajo con la agencia referente de PR de moda, belleza y estilo de vida, llamada Gina Pineda PR, en donde además de divertirme y aprender mucho, tengo la oportunidad de conocer a mucha gente maravillosa dentro de la industria.

 

A.M.A.S. son las siglas de Andreína Melanie, ASesoría de imagen.  Me pareció ideal dar con un nombre que además de incluir mi firma, pudiese comunicar la fuerza en la que más creo para lograr cambios en uno y en el mundo.

 

Y entendiendo lo complejo que puede parecer al comienzo todo el tema de asesoría de imagen, escribí el eBook “Conoce Tu Tipo de Cuerpo”, lo puedes descargar gratis haciendo click aquí.

Y Así Nace 

amasmauve_edited.png
bottom of page